Antes de la caída de Adán y Eva en el hermoso jardín del Edén,
Dios había predeterminado que el Plan de la Redención se llevará acabo;
Dios mismo pagara el precio para rescatar la humanidad con su propia sangre.
Es que Dios siempre ha sabido todo lo que hace y hará, y por toda la eternidad;
Dios no puede aprender cosa alguna, porque todas las cosas: El ya las sabe.
Cuando Satanás engañó a la mujer Eva, y luego hizo participar al hombre Adán,
El episodio del pecado en la historia humana, tuvo su principio para contar.
Nuestra mente tan finita nunca comprenderá de los propósitos de Dios,
Oh, pero un día allá en el cielo, sabremos todo que ahora nos es oculto;
Dios es perfecto y no se puede equivocar, o hacer injusticias, pues es El único Justo.
La verdad es que el Plan de Dios fue profetizado por los siervos de Dios,
Y como Dios había profetizado, se llevó acabo exactamente como El dijo.
Cristo nació en el Belén como Dios habló, sucedió de la manera exacta,
Porque la Palabra del Eterno Creador nunca falla, ni puede fallar jamás
En el Calvario se vió el Cordero Perfecto, enclavado sobre esa cruz Romana,
En sufrimientos y agonía sin igual, el soldado Romano abrió su costado,
Con lanza, para que saliera toda la sangre preciosa del Hijo de Dios.
Así la expiación por sangre fue realizada, y el precio pagado por la culpa del pecado,
Al creer en esa sangre, libre y salvo serán todos aquellos que por fe la aceptarán.
Al mismo tiempo la redención de la tierra nuevamente regresó a Cristo el Creador,
Satanás perdió todos sus derechos, sobre la humanidad, y también sobre la tierra.
No era algo planeado por los Romanos, ni tampoco con los Judíos religiosos,
Esa sangre sacrosanta tenía que ser derramada desde las eternidades.
Dios determinó pagar ese precio, para rescatar a la humanidad entera;
El rescate por nuestros pecados era necesario efectuar, y así salvar a todo ser humano.
La sangre preciosa de Cristo es absolutamente el único remedio para el pecado,
No existe algún otro remedio, o algún otro camino que llegará hasta el cielo.
Al presentar otros remedios, y otros caminos, son fábulas por el mismo Satanás;
Si quiere llegar al Cielo donde vive Dios: Ponga toda su atención en ésto:
Sin la preciosa sangre de Cristo, no existe manera en cómo podría llegar.
Conozca la verdad única, y acéptela, aplicando esa sangre por su pecado,
Y así sin duda alguna, podrá conocer El Camino que hasta la gloria le llevará.
Es el cántico de todos los Redimidos, que sonará por toda la eternidad:
Que fuimos rescatados y salvos por fe: Con la sangre preciosa de Cristo Jesús.
que Dios os bendiga;
Frasquito.